Durante el primer semestre de 2025, la empresa CGE reportó un aumento significativo en el robo de cables eléctricos, con 705 incidentes registrados.
Este aumento, que representa un incremento de casi un 300% respecto al mismo período en 2024, ha dejado a más de 440 mil clientes sin suministro eléctrico. Las regiones más afectadas incluyen Coquimbo, Biobío y Metropolitana.
Se robaron 209. 112 metros de cobre, equivalente a la distancia entre Santiago y la comuna de Molina. La situación ha llevado a interrupciones en el suministro eléctrico para 445. 414 clientes y ha generado costos de reparación que superan los 4. 000 millones de pesos.
Las bandas delictivas, que operan de manera organizada y con personal técnico especializado, se desplazan entre regiones para llevar a cabo estos robos. Estas actividades no solo dañan la infraestructura eléctrica, sino que también afectan la calidad del servicio para muchos clientes. Las regiones con más robos fueron Coquimbo, Biobío, Maule, Antofagasta, Tarapacá y Metropolitana.
CGE aconsejó a sus clientes que eviten acercarse a la infraestructura eléctrica y a cables dañados, ya que podrían estar energizados. Se proporcionaron números de contacto y plataformas para reportar emergencias.
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